martes, 16 de diciembre de 2014

No es el hecho de tener tiempo o no tenerlo sino de propiciar esa disponibilidad

                                                                                                                         Autora: María Sánchez
                                                                                                      E-mail: glezsanzmaria@gmail.com

Son muchos los que deambulan por ahí, faltos de descanso con tanto ajetreo y agobio debido a la crisis del país, la gran competencia que hay junto con la poca demanda laboral. Todo eso aumenta la carga de responsabilidades propiciando un nivel de estrés, enfado y mal humor que ni los titanes de Zeus.

Os propongo un cambio de chip. Comencemos a añadir buenos hábitos, juntos, en familia. La práctica de la lectura, que es lo que nos incumbe, resulta un favorecedor recurso a la hora de compartir con nuestros niños un momento divertido y constructivo, porque juego y aprendizaje forman un equipazo de lujo.


Antes de entrar en materia explicando los diferentes factores para convertirnos en unos buenos narradores de cuentos infantiles (no olvidemos que éstos algún día seguirán sus pasos formándose como instructores de futuros guías y así sucesivamente. ¡Qué bonita cadena de conocimiento y entretenimiento! ¿No les parece?), brevemente informaré de los beneficios que nos aportan los cuentos:

1) Ayudan a los peques a resolver los problemas cotidianos identificándose con los personajes de la  historia, de esta manera, esa involucración hace que sea menos doloroso el conflicto con la realidad y se presente el problema desde otra perspectiva. Aclaración: Esto ocurre así porque cuanta más distancia se coge, mayor objetividad a la hora de abordar el problema.

2) Detrás de todo cuento hay un mensaje en forma de enseñanza, conocimiento, aprendizaje.

3) Abre las  puertas de la imaginación de forma divertida.

4) Realidad y fantasía se unen ayudando a madurar de forma natural. He ahí la magia de las historias.

5) Impulsa el desarrollo de la alfabetización.

6) Conecta a padres, educadores, abuelos, etc. con los niños formando un vínculo especial, construyendo un apego más seguro.

7) Se adquieren valores y se forman hábitos cotidianos.



Hay muchas más ventajas, pero quiero destacar un factor muy importante, el niño ante un cuento se muestra predispuesto a escucharlo (incluso los que no somos tan niños).

Y ahora sí, ¿qué podemos hacer para convertirnos en buenos narradores? No se apuren, que es muy fácil, con seguir estos consejos, presentaréis las historias con más seguridad y estoy segura que no solo se divertirán los niños, porque el objetivo es que tanto ellos como vosotros paséis un buen rato en familia.

Previamente a contar un cuento, es necesario dedicar unos minutos a memorizar un poco por encima la narración, saber de qué se va a hablar; de esta manera, esclarecemos si es apropiada porque a lo mejor en ese momento no nos interesa  trabajar ciertos aspectos que propone la historia y resulte más acorde otro tipo de lectura, también nos damos la oportunidad de poder adaptarlo al nivel evolutivo del pequeño, además de realizar una excelente representación con mímica, acento, correctas pausas, ritmo,...

Explicaré brevemente las técnicas que debéis tener en cuenta:

- Gracias a la mímica se va a favorecer la imaginación, dará lugar a que la creatividad tome partido con la colaboración de objetos o la creación de nuevos recursos, potencia la gestualidad, facilita la imitación y propone una disminución de la timidez o vergüenza.

- El acento en palabras importantes responde a que se entienda el sentido del texto, dando mayor énfasis facilitamos la compresión de lo que acontece, damos cierto ritmo a la entonación y evitamos el aburrimiento. Ahora si vuestro objetivo es que los niños se duerman rápido, basta con leer un tostazo de texto de un tirón. Pero no es lo que queremos, ¿verdad?

- Qué decir del papel tan fundamental que cumple una pausa, os parecerá una tontería pero son imprescindibles para que la imaginación del niño intervenga en  toda la historia. Cuando las pausas son  correctas, la explicación alcanza niveles muy buenos, sosteniendo la narración ese punto concreto para continuarla con un registro diferente. Lo importante es que el niño sienta que la pausa no rompe el hilo de la historia. Se puede incluir un comentario sobre esa parte de la historia para enriquecerla. Las pausas permiten respirar al narrador dando lugar a formar la curiosidad del niño. Eso sí, si nos excedemos en ella, el efecto será contraproducente y quedaría raro, además.

- En cuanto al ritmo, es quien se encarga de evocar sentimientos de forma natural.

Hay muchos más matices por definir, pero teniendo en cuenta estos pocos, bastará para dar rienda suelta a esos grandes narradores que ya sois, solo tenéis que creéroslo.


Bibliografía: 
Taller de cuentacuentos- Guía para ser un buen narrador de cuentos infantiles por Pepa Lavilla, Editorial ALBA
Imagen:  http://www.inesbengoa.com/

martes, 9 de diciembre de 2014

Taller de cuentos

Autora: La maleta de Lili
Twitter: @LamaletadelaLil

Este proyecto nació cuando La Mamavaca, me dice que realice un Taller de Cuentos para familias con niños entre los 5 meses y los 3 años.

La propuesta era de crear un taller con una duración trimestral, en el que un día a la semana las familias participantes pudieran compartir con sus hijos/as la animación a la lectura, descubrir cuentos y compartirlos. Las familias participantes podían traer libros/cuentos que hubieran comprado, que les hubieran regalado, o si los habían cogido en la biblioteca para compartirlos con el grupo.

Teniendo presente que muchos estudios realizados demuestran que explicar o leer una historia en voz alta desde los primeros meses de vida, es importante. Mis objetivos en relación al Taller de Cuentos, eran precisamente favorecerlos:

- Reforzar el vínculo afectivo
- Favorecer la adquisición de la competencia lingüística
- Potenciar la capacidad de observación, atención, y concentración
- Estimula la imaginación y la creatividad
- Desarrolla el gusto por aprender
- Ayuda a establecer una relación constante entre el pequeño y el mundo que le rodea.

Al tener una duración de tres meses, planteé el proyecto en relación a los temas de interés de la edad evolutiva: relaciones afectivas, aprendizaje, juego, hábitos... La base del taller eran los cuentos seleccionados, que se dividían en dos grupos, los que explicaba y los que estaban al alcance de los niños en un cesto.

Para poder mejorar el proyecto, se realizó una auto-evaluación de cada sesión. Aquí, valoraba los cuentos seleccionados, cuales habían funcionado o no, cuantas familias habían participado, y añadí unas observaciones generales.

 

Cada sesión tenia una duración de hora exigida. Por tanto dividí esta hora en tres partes. En la primera parte se iniciaba con música de Enya, siempre utilizaba la misma canción, y saludando a la pequeña Lili ( un hada).


Durante la segunda parte, se explicaban los cuentos seleccionados relacionados con el tema que tocaba. Y, en la última cada familia compartía algún cuento de forma individualizada.
Durante este tiempo se compartían dudas sobre qué cuentos elegir, donde encontrarlos, hablábamos de la importancia de los cuentos.

 
Al mismo tiempo cree unas maletas viajeras, en las que cada semana una familia elegía un par de cuentos que se llevaban a casa para compartirlo. En estas maletas, también había una agenda, en la que las madres escribían como había ido el cuento/s seleccionado, si les había gustado...
 

A la semana siguiente estos cuentos regresaban, y otra familia escogía cuentos. De tal forma que todas las familias participantes tuvieran la oportunidad de llevarse cuentos.

Con estas maletas viajeras, mi objetivo principal, era el de crear un punto de conexión entre madres que no se conocían. Y, que a la vez, descubrieran que hay muy buena literatura infantil. 

Cuando finalizó el mes de Diciembre, muchas de las familias participantes, se quedaron con ganas de continuar. Los meses compartidos, se habían pasado, y querían más, deseaban seguir escuchando y compartiendo cuentos. No pudo ser posible, la tienda había decidido no continuar el siguiente trimestre.7

Aún así, mi experiencia con este proyecto se enriqueció notablemente. Y, todo lo que ofrecí he podido posteriormente realizarlo en otros contextos diferentes pero siempre con el mismo objetivo: compartir la magia de los cuentos y la Animación a la Lectura. 

Como despedida del Taller de Cuentos, realicé un CD con fotos de los momentos compartidos a todas las familias que participaron. 

Diseño y realización del proyecto: Angeles Ortega. 
Educadora Infantil y Animadora a la Lectura.


Fuentes: 
Los libros, eso es bueno para los bebés. Autor/a: Marie Bonnafé.  Editorial: Océano Travesía, 2008. 
Nascuts per llegir

martes, 2 de diciembre de 2014

Los cuentos



Autor/a: Alicia Recio
Escuela: Escuela Infantil Municipal Arco Iris
Twitter: @EIArcoIris

ÉRASE UNA VEZ... 

Una Escuela, llena de luz y color, en la que convivían varios niñ@s y tres maestras. Estas tres maestras siempre estaban inventando algún juego divertido que hacer con sus pequeñ@s alumn@s y siempre les sobraba un poco de tiempo para poder comentarles a los papás y mamas, de los pequeñ@s, las aventuras que habían vivido. Aunque, también les servía, para darles algún que otro consejillo. Esto siempre lo hacían a través de un blog. 

¿Y qué blog es? Os preguntaréis. 
Dicho blog es este
 BLOG 

Como podéis comprobar los cuentos no solo se utilizan para entretener a los pequeñ@s, si no que son un recurso estupendo para aprender una gran cantidad de cosas. Y además, no todos los cuentos son para niñ@s, hay muchos que se utilizan para hacer reflexionar a adolescentes y adultos. Aunque, en esta ocasión, quería comentaros cuáles son los beneficios que estos grandes aliados provocan en nuestros niñ@s.


BENEFICIOS

1.El hábito lector es un hábito social, es algo que está bien visto, pero tiene su por qué. Gracias a esta rutina lectora que se crea en las personas, estas, son más dadas a reflexionar, a abrir su mente ante distintas situaciones y a crear fácilmente resoluciones de conflictos. Este hábito no se consigue por obligación. Se consigue viviendo la lectura; por ejemplo: viendo leer a los progenitores, visitando librerías y bibliotecas por el gusto de ojear libros,escuchando historias, disfrutando de la escucha de una lectura...

Os animo a vivir con vuestr@s hij@s la lectura. Al principio si son muy pequeñ@s creeréis que no sirve para nada y que ell@s "no se enteran".

Aquí, en la Escuela, tod@s l@s futuros gigantes se relajan visionando libros y disfrutan muy a menudo de lecturas. Así que ¡¡animaros!!

2.Crear situaciones en las que se hable y se reflexione sobre los errores que cometen en su día a día. Por ejemplo, hay padres y madres a las que les preocupa que sus pequeñ@s puedan tener unas malas conductas hacia los demás. Pero no saben como hablar este tema con sus hij@s.

Os animamos a buscar cuentos que expongan esa temática que os preocupa (se hace pipí, no come, pega...) o inventároslos vosotr@s mismos. Vuestros pequeñ@s se sentirán identificad@s con los protagonistas del cuento y sabrán, imitando a los personajes del cuento, darle otro tipo de solución a sus vivencias.

3.Desarrollan la memoria. Gracias a las retahílas y a las frases que se repiten en los cuentos, los niñ@s aprenden nuevas palabras que ayudarán a aumentar su vocabulario. 

Un buen ejercicio para fomentar su memoria es leerles un cuento y, después de haberlo terminado, preguntarles sobre lo reflejado en este. Por ejemplo, ¿Cuántos cerditos eran? ¿Quién quería hacerles daño? ¿De qué material eran las casas que construyeron?.... Y si no sabemos la respuesta, la buscamos. ¡¡Qué es otro ejercicio buenísimo para nuestros futur@s triunfadores!!

4.A través de la lectura, se aprende también el arte de escuchar y a ser pacientes. A dejar ver que pasa, observarlo, y una vez que se haya reflexionado sobre ello, actuar.

Ayudemos a nuestr@s pequeñ@s a crear sus cimientos para ser personas sanas y abiertas.

5.Los cuentos ayudan a entender el espacio-tiempo. A saber cuál es el antes y el después y a entender dónde y cuándo suceden las cosas. Habilidades muy importantes para su futuro como estudiantes y personas sociales.

6.Por supuesto, gracias a los cuentos fomentamos la creatividad e imaginación. Habilidades que son importantísimas, además, para la resolución de problemas.

7.Los cuentos transmiten valores. Nos enseñan lo que es la amistad, la constancia, la modestia, la lealtad... Además de hacernos entender, comprender e identificar estados de ánimo y emociones. Como la felicidad, la frustración, la ira, la venganza, el amor, el miedo...

8.Aumenta su desarrollo del lenguaje. Gracias a los cuentos el vocabulario de nuestros pequeñ@s se expande y permite descubrir nuevos modelos expresivos y disipar dudas de construcción gramatical. 

9.Por ende, su capacidad de comprensión se ve beneficiada. Muchos de los problemas escolares que se viven hoy en día vienen dados porque los niñ@s no comprenden lo que leen. A veces, esto se puede ver hasta en las universidades. Esto solo hay una manera de paliarlo, leer. Creando el gusto por la lectura.

10.En definitiva, vuestros hij@s desean vivir su vida a vuestro lado y, gracias a este recurso, podréis encontrar un aliado perfecto para incrementar la comunicación entre vosotr@s y la confianza que tanto ansían algunos padres cuando sus hij@s se convierten en adolescentes. ¡Empecemos ahora!

Espero que la lectura de esta entrada os motive para leer delante de vuestr@s pequeñ@s, para leerles a ell@s y para invitarles a comprar un libro para que puedan verlo o para que podáis compartir un ratito íntimo.

PD: Si queréis aprender más podéis hacerlo aquí, aquí,y aquí.